Kahlúa se compone meticulosamente a partir de granos de café 100% arábica, cosechados en las alturas del exquisito altiplano de Veracruz. Estos granos, de carácter ligero, están imbuidos de sutiles matices de chocolate, tostados con delicadeza para resaltar su sabor sofisticado. Luego, se trituran de manera sumamente cuidadosa para preservar su dulzura natural. Este café molido se infusiona con agua, apenas pasando por un breve proceso de filtración. A continuación, se fusiona armoniosamente con el espíritu del azúcar de caña, la vainilla y un toque de caramelo, dando vida a Kahlúa.