“El bebedor alegre” (1624-1626), de Gerard Seghers

Gerard Seghers (Amberes, 1591-1651), fue un pintor barroco flamenco, a la vez que uno de los más destacados caravaggistas de los Países Bajos del Sur.
29 de mayo de 2020 por
“El bebedor alegre” (1624-1626), de Gerard Seghers
Alberto Muñoz

Gerard Seghers (Amberes, 1591-1651), fue un pintor barroco flamenco, a la vez que uno de los más destacados caravaggistas de los Países Bajos del Sur. Cultivó tanto el género histórico como el mitológico, pero es a la pintura religiosa a la que se dedicó con mayor asiduidad y de la que mayor número de obras se han conservado. Su obra no fue ajena al vino. Esto lo podemos comprobar en “El bebedor alegre”, fechado entre 1624 y 1626.

Gerard_Seghers_-_The_Jolly_Drinker_-_Walters_372745.jpg

Descendiente de una familia calvinista convertida al catolicismo tras la toma de Amberes, Seghers fue bautizado en esta ciudad el 17 de marzo de 1591. Su formación inicial la recibió de su hermano Jan Baptista Seghers, orfebre de profesión. Algunas fuentes hablan también de un posible paso como aprendiz por los talleres de Abraham Janssens o de Hendrick van Balen, pero parece más probable que fuese Gaspar Crayer padre el verdadero responsable de su formación como pintor. Artista precoz, ya en 1608, con sólo 17 años, fue admitido como maestro pintor en el Gremio de San Lucas. Hacia 1613 se encontraba en Italia haciendo compatible su trabajo como pintor con el de comerciante de arte. En Roma entró en contacto con los seguidores de Caravaggio y en particular con Bartolomeo Manfredi, cuya influencia se hace sentir en la más conocida de las obras de Seghers de esta época: su Judith con la cabeza de Holofernes de la Galleria Nazionale d’Arte Antica de Roma. De Italia pasó a España donde, según su propio testimonio, trabajó para Felipe III, retornando definitivamente a Amberes en 1620, donde casó (1621) con Catherine Wouters, con quien tuvo once hijos.

Aunque el ambiente artístico de la ciudad parecía dominado por la pintura de Pedro Pablo Rubens, Seghers se mantuvo fiel en un primer momento al tenebrismo caravaggista y sus fuertes efectos de luz, trabajando especialmente para los jesuitas, pero hacia 1630 su paleta comenzó a aclararse, dando entrada a la influencia de Rubens, alguna de cuyas composiciones llegó a imitar como se advierte en la Adoración de los Reyes Magos que pintó para la Iglesia de Nuestra Señora de Brujas. Desempeñó algunos cargos de relieve, especialmente tras la muerte de Rubens cuando se convirtió en decano del gremio, alcanzando notoriedad y riqueza. Entre sus alumnos son conocidos Thomas Willeboirts Bosschaert y Peter Franchois.

“El bebedor alegre” (1624-1626), de Gerard Seghers
Alberto Muñoz 29 de mayo de 2020
Compartir esta publicación
Etiquetas
Nuestros blogs