No basta con volver al pasado. En 2025, los clásicos entran al siglo XXI con actitud: nuevos ingredientes, formas y tecnologías. No son inventos radicales. Son versiones que respetan la esencia, pero sorprenden.
Aquí, algunos clásicos que están renaciendo con estilo.
1. Jungle Bird y el auge del “aperitiki”
Este cóctel tiki–apertivo (ron oscuro, Campari, piña y lima) vive una segunda juventud. La tendencia “aperitiki” reinventa sabores tropicales con amargos europeos The Washington Post. Resultado: una doble experiencia refrescante y sofisticada.
2. Cócteles infinitos: el “Infinity Cocktail”
El concepto más viral del año. Se trata de versiones que se transforman con cada adición, en botella compartida. El Negroni infinito y el Daiquiri infinito son ejemplos memorables Food & Wine. Los clientes participan de la evolución del sabor: una estrategia que une experiencia y storytelling.
3. Silk Road Red: el Negroni reinventado
2026 ya tiene su ícono en el Silk Road Red. Un Negroni actualizado con Tuvè Bitter y Bonal, reemplazando el clásico Campari y vermut. Igual pasión, pero nuevo tono y nuevas notas aromáticasWikipedia+15Veranda+15diageobaracademy.com+15.
4. Clásicos con giros frutales y refrescantes
Margaritas sangre de naranja, Negroni con mango o pasión… Los bartenders del sur de EE.UU. lideran esta ola fresca, especialmente en verano Southern Living+1. No reinventan la bebida, solo la despiertan con fruta de temporada.
5. Soju, el giro asiático en los clásicos
Ligero, sutil y versátil. El soju está colonizando clásicos como los cócteles de estilo martini o Negroni, adaptándolos a paladares que buscan frescor y suavidad Better Homes & Gardens. Funk moderno sin abandonar la estabilidad de los clásicos.
En 2025, reinterpretar clásicos no es cambiar para romper. Es ajustar: añadir frescor, compartir experiencias, sorprender sin perder historia. Sea un bany absolución futurista, un trago mutable o una fruta de temporada, el hilo común es la intención detrás del cambio.
Revisa tu carta. Mira qué clásico puedes reinterpretar con carácter. El buen cóctel nunca deja de evolucionar.