El Sazerac es, probablemente, uno de los cócteles más antiguos del mundo. Nacido en Nueva Orleans a mediados del siglo XIX, combina el dulzor del azúcar con el golpe herbal de la absenta y el toque especiado del amargo de Peychaud.
Ahora bien, si cambias el whisky o el coñac por mezcal, el resultado es otra cosa: una versión más seca, más ahumada, más profunda. Un cóctel que respeta la estructura clásica, pero la lleva directo al corazón de México.
El Sazerac de Mezcal no es un capricho. Es una forma de reinterpretar una receta histórica con identidad local y un perfil mucho más gastronómico.
Ingredientes del Sazerac de Mezcal
- 60 ml de mezcal artesanal
- 1 terrón de azúcar o 10 ml de sirope simple
- 3 golpes de amargo de Peychaud
- 1 chorrito de absenta (en spray o rinse)
- Hielo para remover
- Piel de limón para aromatizar
Se sirve en vaso corto bajo, sin hielo, con las paredes perfumadas con absenta y el borde aromatizado con la piel de limón.
Por qué incluirlo en tu carta (aunque no lo pidan)
El Sazerac de Mezcal no es un cóctel de rotación alta. Es un cóctel de impacto. Uno de esos tragos que el cliente recuerda, que marca conversación, que convierte una barra en un espacio de cultura líquida.
Ventajas reales para tu local:
- Ideal para clientes que buscan nuevas experiencias.
- Rentable: ingredientes sencillos, técnica limpia, alta percepción de valor.
- Buena opción para maridar con quesos, carnes curadas o chocolate amargo.
- Sirve para elevar el discurso de tu carta con una propuesta sólida y sofisticada.
Claves para servirlo bien
- Mezcal correcto
Elige un mezcal joven, 100% agave, con notas ahumadas limpias y fondo herbal. No uses mezcales dulzones ni infusionados. - Control de absenta
No debe invadir el cóctel. Un enjuague del vaso o un spray fino bastan para dejar su huella. - Sin hielo en el vaso
El cóctel se remueve con hielo y se sirve frío pero sin diluir. Es parte de su carácter. - Aroma, no decoración
La piel de limón es para exprimir sobre el vaso, no para decorar. Expulsa los aceites, pásala por el borde y descarta.
Cuándo ofrecerlo
- Como cierre de comida o cena (digestivo potente).
- En noches especiales con clientes que buscan algo nuevo.
- En catas o degustaciones de mezcal.
- Como sugerencia del bartender a quien pide “algo seco, con carácter”.
El Sazerac de Mezcal no será tu trago más vendido. Pero sí puede ser uno de los más potentes en imagen, diferenciación y fidelización.
Incorpóralo, explícalo, defiéndelo. Y verás cómo el cliente adecuado lo pide, lo agradece y vuelve.
El Sazerac de Mezcal: